lunes, 23 de enero de 2012

I’m not me anymore



“Al cabo de 3 libros me queda más por decir que antes de empezar a escribir el primero. Se produce un doble fenómeno, como si la escritura ordenara la memoria y la despertara a la vez. Sobre todo en alguien como yo, que había organizado un periodo voluntario largo de silencio y olvido para poder vivir. La escritura despierta y ordena la memoria, cuanto más escribo más me queda por decir. Se forman asociaciones, interconexiones, referencias que se nutren de la propia experiencia y de lo que sucede después. No diré que nos encontramos ante lo indecible, lo inefable. Creo que se puede decir todo pero que nunca acabaremos de decirlo”. Estas palabras de Jorge Semprún hablan muy bien de la importancia de la memoria. Somos lo que recordamos, tanto los buenos recuerdos como los malos nos hacen ser lo que somos. Fue en junio del año pasado cuando moría la que es una de las grandes memorias españolas del siglo XX. 2011 fue también el año Internacional de la investigación en Alzheimer. A esta enfermedad, que sufren unas 600.000 personas en España y que afecta a más de 3,5 millones de personas, dedicamos el último Continum. Porque, como decía Semprún, se puede decir todo, y aunque nunca acabemos de decirlo, en lo que al Alzheimer se refiere, aún queda mucho, muchísimo por decir.

Unas 600.000 personas sufren de Alzheimer, una enfermedad que afecta a más de 3,5 millones en España. En el programa podremos escuchar a Arsenio Hueros, director de la Confederación Española de Asociaciones de Familiares de Personas con Alzheimer y otras Demencias (Ceafa). La Ceafa patrocinará La Memoria es el Camino, la aventura del periodista navarro Guillermo Nagore, que en marzo emprenderá un viaje que le llevará a atravesar a pie el sur de Europa desde el faro de Finisterre hasta Jerusalén. Guillermo contará su periplo en un blog desde el que nos sensibilizará sobre la enfermedad con las historias que se vayan cruzando en su camino. Mª Ángeles Pérez, directora gerente de Fundación CIEN (Centro de Investigación de Enfermedades Neurológicas) nos pone al día de los últimos avances médicos y Halldóra Arnardóttir nos cuenta su experiencia al frente de Arte y Cultura como Terapia, una innovadora inciciativa de tratamiento no farmacológico contra el Alzheimer.

Lo que sigue es la traducción que hice de una impactante carta que me econtré buscando una canción apropiada para el programa. La publicó el músico Jerry Lansdowne -compositor que escribió canciones para Johny Cash, entre otros- en su MySpace:

«Como los amigos me han visto luchar para completar mi canción más reciente, titulada I'm not me anymore ("Ya nunca más seré yo mismo") varios de ellos me han expresado su preocupación. Se preguntaban qué es lo que me había llevado a escribir una canción sobre la enfermedad de Alzheimer. ¿Cuál era el objetivo? ¿Quién la escucharía? ¿A quién le iba a importar? Ellos también empezaron a preguntar si tal vez me estuviera descentrando demasiado. Me empezaron a preguntar si estaba bien.

Bueno, lo primero de todo, si eres alguien que realmente me conoce, sabes que siempre he sido un poco descentrado, al menos en lo que se refiere a lo que el mundo entiende por centro. Siempre he sido considerado como un bicho raro, un poco fuera de onda, terriblemente honesto, demasiado introspectivo, demasiado sensible, y muy pero que muy vehemente (aunque yo prefiero la palabra apasionado).

De todos modos, no hay por qué preocuparse sobre mi salud. Estoy bien, sano, feliz (la mayoría de las veces) y todavía sigo siendo el extraño que siempre he sido.
Y en cuanto a la razón por la que escribí I’m not me anymore, la respuesta es sencilla: Tenía que hacerlo. Como algunos de vosotros sabéis, mi madre falleció de Alzheimer días después de las Navidades de 2005. Un día, unos seis meses antes de su muerte, me encontraba a los pies de su cama cuando como por arte de magia se enderezó apoyándose en un codo y extendió su mano hacia mí. Mi madre apenas se había podido mover en un año, así que cuando llegó hasta a mí y empezó a hablar, me quedé estupefacto. Por un breve instante, pareció como si cada célula de su cuerpo se hubiera recuperado milagrosamente. Ella apretó mi mano, se me quedó mirando con los más cálidos, los más tranquilizadoramente profundos ojos azules, y me dijo: "I’m not me anymore".

Me quedé sin habla…

Aquella tarde mientras conduje sesenta millas de vuelta a casa. No podía pensar en otra cosa que no fueran las palabras que había pronunciado, "I’m not me anymore". Sabía, que algún día, me valdría de estas palabras en una canción.

Bueno, aquí estamos casi un tercio cumplido de 2009, y al menos estoy viendo terminada las letras de “Ya no soy yo nunca más”. Completar esta canción ha sido lucha larga, desafiante y llena de lágrimas, intensificada aun más por la posibilidad de que un día yo pudiera enfrentarme al mismo destino de mi madre.

Para aquellos que tienen seres queridos que están sufriendo de demencia o de enfermedad de Alzheimer, les hago llegar mis más cálidos pensamientos y plegarias. Desafortunadamente, mi canción no cura nada, no promete nada, y no ofrece un final feliz. Mi esperanza más profunda es que con esta canción, los oyentes se llenen de un poco más de comprensión y compasión por los millones de almas queridas a las que condena cada año el Alzheimer».

alberto sánchez medina







No hay comentarios:

Publicar un comentario